El Congreso del Estado aprobó las reformas a la Ley de las Mujeres a una Vida Sin Violencia con el objetivo de modernizar el marco jurídico para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia así como otorgar certeza a las mujeres en el ejercicio pleno de sus derechos humanos y libertades fundamentales.

De esta manera, los diputados de la Comisión de Igualdad y Género  realizaron una revisión  completa  que los llevó a reforzar los mecanismos, que para lograr erradicar este mal social y alcanzar su completa aplicación, de acuerdo con la realidad social y las necesidades actuales.

Al respecto, se pronunciaron por crear un Registro Público Sistemático de los Delitos Cometidos en Contra de las Mujeres, que incluya la clasificación de los hechos de los que tenga conocimiento, lugar de ocurrencia y lugar de hallazgo de los cuerpos, características sociodemográficas de las víctimas y del sujeto activo, los índices de incidencia y reincidencia, consignación, sanción y reparación del daño.

Este registro se integrará a la estadística criminal y victimal para definir políticas en materia de prevención del delito, procuración y administración de justicia.

De igual manera, consideraron de  suma importancia conformar el Consejo Estatal para la Prevención, Atención, Sanción y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, como un órgano de dirección encargado de coordinar las acciones del Sistema Estatal, para lo cual se establecerá su integración, así como sus atribuciones en el reglamento respectivo.

Cabe destacar que  la importancia de hacerlo radica en que el bien jurídico tutelado es el derecho humano de las mujeres a una vida libre de violencia y que acorde con los  compromisos internacionales y con las leyes generales; para ello se hace manifiesta la necesidad de armonizar esta Ley Estatal de acuerdo con la Ley General.

Al respecto, los representantes populares acordaron ampliar las facultades que le otorga la ley al Ejecutivo del Estado, para ser garante de los derechos de las mujeres indígenas reconocidos por México en su actuación internacional.

Así como difundir y promover dichos derechos, vigilar que los medios de comunicación no promuevan imágenes estereotipadas de mujeres y eliminen patrones de conducta generadoras de violencia y finalmente que se les reconozca su composición pluricultural .