Según la investigación realizada por la Fiscalía de Jalisco, el 19 de marzo, los tres estudiantes junto con otros cuatro jóvenes acudieron a una finca en Tonalá en donde grabaron un trabajo escolar, sin embargo, esta finca estaría involucrada con un grupo criminal conocido como Cártel Nueva Plaza.
De acuerdo con testigos, durante 2017 se vio a personas armadas dentro de este lugar, además, ahí fue detenido en 2010, Diego Gabriel Mejía, quien sería un líder de este cártel.
La casa donde los estudiantes realizaron su trabajo escolar fue vigilada días antes por dos sujetos identificados como Gerardo y Omar, pertenecientes al Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes ya se encuentran detenidos; ellos buscaban a Diego Gabriel Mejía, pues en los próximos días podría quedar liberado luego de cumplir su condena, su fin era detener la operación del Cártel Nueva Plaza.
Este hombre y su esposa, le habrían entregado a la tía del estudiante Javier Salomón, Edna Judith, la propiedad de la casa y de varias estéticas en donde se ejercía la prostitución. Por esta razón, el 3 de abril, la tía de Javier fue la primera detenida, y acusada de lenocinio.
Los estudiantes habrían sido levantados por seis personas armadas, quienes se los llevaron en dos camionetas tipo Pick up.
Luego de ser levantados por el grupo criminal, fueron llevados a una casa ubicada en la calle Lechuza de la colonia Pinar de las Palomas.
Ahí habrían interrogado y golpeado al joven Jesús Daniel Díaz (una mancha de sangre suya sería la principal evidencia de los golpes) y, de acuerdo con la investigación de la Fiscalía, en esta misma casa habrían sido asesinados los tres estudiantes.
Luego los cuerpos habrían sido trasladados a la finca que fue cateada la semana pasada, ubicada en la en la colonia Rancho de la Cruz, donde los cadáveres fueron disueltos para borrar cualquier evidencia. En el lugar se encontraron 56 litros de ácido sulfúrico.