Durango figura en el mapa con la realización de eventos de talla internacional como la Carrera Panamericana, expresó el gobernador José Rosas Aispuro Torres al recibir por quinta ocasión, en la capital del estado, a los pilotos ganadores de la competencia automovilística que reúne a los mejores de todo el mundo, en su edición XXXI.
Por quinta vez consecutiva, Durango fue el escenario para que los más de 60 autos clásicos y rápidos en caminos abiertos, cruzaran la meta tras recorrer casi cuatro mil kilómetros de distancia, siendo el piloto Emilio Velázquez y su copiloto Christian Coronel quienes se adjudicaron el primer lugar por segunda ocasión, seguidos de la pareja Hilaire y Laura Damiron en la segunda posición, mientras que el tercer peldaño fue para Luis Alfonso y su hijo Luis Pablo Cervantes.
“Es un gran honor recibirlos en Durango”, dijo el Gobernador al celebrar la llegada de pilotos internacionales y los mejores de rally en México que durante siete días sortearon pruebas de velocidad y destreza en La Carrera Panamericana 2018, a quienes reiteró su compromiso para seguir apoyando esta importante competencia que desde hace cinco años tiene como meta la entidad duranguense.
Grandes y pequeños no perdieron la oportunidad para ver desfilar a figuras destacadas en el mundo del automovilismo como el piloto mexicano Mario Domínguez que fue el Gran Marshall de esta edición, así como a corredores de todo el mundo que con gusto posaron para las fotografías en sus clásicos y coloridos carros.
La edición XXXI de esta competencia automovilística inició en Oaxaca, pasó por la Ciudad de México, Querétaro, Morelia, Guanajuato, Zacatecas y finalizó en Durango, donde los pilotos recorrieron gran parte de la carretera libre Durango- Mazatlán con pruebas de velocidad en parajes como Río Chico, El Soldado, El Palmito, Espinazo del Diablo, Las Rusas y Mimbres, hasta llegar a la meta en la comunidad de Metates.
Este año representaron a Durango en La Panamericana fueron los tripulados por Xavier y Diego de la Madrid a bordo del Ford Falcon 1965, además del que conducía Agustín Reyes y su copiloto Roberto Rangel en el Mustang 1965.